SANTIAGO. Los chilenos conmemoraron ayer el 33° aniversario del golpe militar de 1973 con Augusto Pinochet ausente y olvidado hasta por sus partidarios, pero sin haber superado del todo la división que generó la caída de Salvador Allende.

Durante la jornada, miles de chilenos recordaron al presidente socialista y a las víctimas de la dictadura que se instauró tras su caída, mientras que apenas cuatro mujeres llegaron a la mansión que Pinochet tiene en Santiago con la intención de homenajearle.

El ex dictador, de 90 años, está marginado de la política y actualmente enfrenta varios procesos en su contra por violaciones de los derechos humanos y corrupción.

“A 33 años del golpe, nosotros estamos acá con respeto y recogimiento por aquellos que perdieron la vida en esa ocasión y también en la lucha por reconstruir la democracia en nuestro país”, dijo la presidenta Michelle Bachelet, tras asistir a una misa en el Palacio La Moneda, a la que asistieron familiares de Allende, dirigentes políticos, parlamentarios y ministros.

Bachelet, cuyo padre, el general Alberto Bachelet, fue detenido el mismo 11 de setiembre de 1973 por sus propios camaradas de armas y murió en prisión en 1974, rindió homenaje a los caídos.

Este año, en tanto, el Ejército, por primera vez, no realizó un acto oficial para la fecha. SANTIAGO | EFE. Los chilenos conmemoraron ayer el 33° aniversario del golpe militar de 1973 con Augusto Pinochet ausente y olvidado hasta por sus partidarios, pero sin haber superado del todo la división que generó la caída de Salvador Allende.